el pensar de un perro

los humanos dicen que nosotros
no estamos conscientes de nuestra
partida a este mundo, pues les digo
que los humanos están equivocados,
nosotros si estamos consciente de nuestra
partida solo que no lo decimos como ellos.

en mi juventud fui un perro muy
alegre, mis dueños me querían mucho y
yo los queria mucho a ellos, siempre
los protegi, siempre los ame como nunca
nadie mas lo habia hecho, no importa que no
jueguen muchos conmigo, con cada plato de
comida que me daban, yo me dada por satisfecho.

con el pasar del tiempo, fui envejeciendo
y mis patas traseras
ya no caminaban tan bien como antes,
me cansaba mas a menudo,
ellos me miraban con preocupación
pero yo sabia por que me miraban así,
pues mi hora ya había llegado
y estaba consciente de que moriría

pero saben que hice,
pues fingí estar bien frente de mis dueños
para que creyeran que me estaba recuperando
poco a poco. lo hice para no preocuparles, ahora
los veo desde el cielo
y les digo que no lloren por mi,
yo estare bien donde estoy
pero lo único que les pido,
es que sean felices en su vida,
nada me haría mas feliz que eso