DE LA SERENIDAD
poema de Mario
SENTADO EN EL TRONO de mis sienes
miro cristales preciosos recostados
en rocas. De las rocas fluye agua, apenas
y un chisguete que humedece el filo
de los cristales.
Las rocas no me dicen nada
no hablan y no mienten.
Tan solo asienten el viento
que ciñe su vacío.
A lo lejos miro a un hombre sereno
con la cara estoica y amable.
Su pelo largo y sus ropas
ondean como esas rocas
cubiertas de cristales.
Comentarios & Opiniones
Hermoso poema que trasmite la serenidad que anticipa su título. Y yo pregunto, ¿tal vez el hombre sereno con la cara amable y estoica sea nuestro amigo Mario? Un fuerte abrazo.
Ángel Menduiña Iribarren agradezco siempre su presencia, y el tiempo que otorga a mi impronta. Siempre tan presente como —no el mejor, ni el menos peor— el buen amigo. Sincero y generoso. Así son los amigos: sin más. Gracias por su amistad y atención
Agradezco al buen tiempo y al influjo gravitacional, que hacen posibles: grandes encuentros.
Reciba mi admiración y respeto.
¡Abrazo!
Linda imaginación, creas un grato ambiente, sereno, de paz, de silencio; siempre un placer, abrazos Mario, linda tarde amigo.
Cristales como el cristal roto que dejé sin pegar en el cajón de mis anhelos.
Le sumarias belleza a tú obra, si la recitas.
Caballero, con el respeto con que vos siempre comenta en mi espacio, hoy le llamaré por Vuestro nombre, dado que ésta obra personifica en forma retrospectiva una cercanía a vuestra persona. Así me parece que lo deja ver hoy.
Mario caballero, respetuosamente diré que traza vos sobre un lienzo una descripción de la imagen colocada en el perfil
-estoico-
Observando desde el escenario a la sucesión de palabras; asiduo, presente.
Vos obsequia un mirada cercana hacia al interés, de quien se mantiene adyacente al significado de vuestro propósito, intelecto y voluntad.
Reciba mis siempre saludos y abrazo de luz azul.
Xio, muchas gracias siempre por su oportuna presencia.
Lety Acevedo agradezco su comentario. El hecho que evoque sensaciones suyas, este escrito cumple su acometido. Tomaré en cuenta la declamación. Gracias totales.
Gabriella, siempre tan auspiciosa en tus intervenciones. Agradezco el gesto de la palabra generosa que se comparte y se colma en gracia.
¡Abrazo eterno!
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