Déjame

dejame
amanecer en tu sonrisa
desayunarme con tu boca
beber el jugo de tu vientre

dejame
bañar mis ojos con tus besos
secar mi piel con tus caricias
vestir tu cuerpo con mis manos

quiero despertar
sintiendo el fuego de tu hogar
con cada verso deshojar
tu corazón una vez más
quiero ver la luz
que solo tu nombre me da
y en cada anochecer
volverte a amar

dejare
que uses mi pecho como almohada
despertando cada mañana
con la emoción de ser amada

dejare
que aún dormida sientas ganas
de abrir las puertas y ventanas
para calmar mi cuerpo en llamas

roberto peiretti