A un Escorpio

Bajo tu mirada, la mirada que abrazan mis recuerdos, encuentro tu dulce voz, tu suave hablar que en tanto evocan devoción a tus labios, a tu ser.

La fragilidad de los deseos, que se pierden ante una desdichada, florecen en presencia de tu dulce voz, tu ser, y a un amanecer a tu lado.

Quiero sentir tu amor y mi fragilidad,
Quiero sentir tu andar y mi corazón quiere sentir tu presencia en perpetuidad.

Camino un sendero en soledad, la culpa de no sentir tu calor, tu amor, tu pasión ponen en vilo mi capacidad de comprender cuanto perdí y mi amor fatigado por ti.

En mis sueños siento el frenesí de tu amor por mi, un amor que no fue, un amor que perdí, en mis sueños sé que seré feliz, lo mismo desearé, lo mismo a ti, a tu ser y el frenesí de ser amada por ti.

El padecimiento, la vergüenza, el dolor y la pérdida, serán mi castigo por ti, los arrebatos de amor que mi corazón evocan recuerdos de cuanto fui feliz junto a ti.
Mi corazón siempre gritará en silencio el amor que dejaste marcado en mi.