Postales perpetuas

Me acaricias
sutilmente
puedo sentirlo
puedo palpar tus pasos
las palabras que no se pronuncian
la brisa eterna que despliegan
tus ojos negros.

No me dices nada
no hace falta
te intuyo
te leo
entre nosotros
las postales se precipitan
lo celebro
lo encumbro
hay misterio
hay canto.

Hoy
hemos coincidido
en los tejidos del tiempo
en la inmensidad del espacio
estamos cerca
aquí y ahora
no temas
no naufragues
no discutas
tampoco difieras
no le pongas pies ni cabeza
a lo incomprensible
no vistas de miedo
a lo irremediable
levanta tú copa
y hagamos un brindis
comprueba que la muerte
aún no se ve
por nuestro retrovisor
y al rayo de luz
sólo le basta una rendija
para inmiscuirse.

Mira que en nuestros bolsillos
habitan soles
no lo olvides
no lo ignores
cualquier signo
es un fósforo
un susurro perpetuo
una lámpara a punto de alumbrar.