Límite

¿Qué soy si no me reflejo en tus ojos?

¿si tus manos no me limitan el cuerpo?

No existo en tu boca, mi lengua desaparece

y aún sin estómago mi hambre crece

Y soy lágrimas sin ojos, grito sin boca

cargo montañas en espalda de roca.

Cicatrizan las caricias aún no dadas

y cristalizan la nerviosa locura

que me ha devorado todo medio

de sentirte de nuevo con más prisa.

Y ya sé que tal vez te de algo de risa

pero no puedo más, es más que tedio,

porque duele el alma, duele la piel

de extrañarte,

de tanto extrañarte.