Versos tristes II

Hoy día, cada vez me duele perder un minuto más y estas tardes obscuras me asustan y no me hacen bien.

Se qué hay algo que me falta siento nostalgia y a la vez melancolía cuál príncipe buscando a su dama perdida.

Caí en una desgracia me liberé, pero en el transcurso de gente me distancie, según yo era para proteger a mis seres queridos hoy me doy cuenta que no fue así perdí la magia con mi musa más especial te estoy perdiendo a ti.

No te supe valorar no fue mi intención pero si mi culpa al final, que pena que hayas conocido una versión defectuosa de mi, una mera ilusión. De mi existir y es que cuando eres adolescente todo lo que quieres se pierde, no sabes ni mantener una amistad.

El universo me presentó a una persona muy especial, la casualidad nos regalo una cita , el recuerdo de tu sonrisa me dislumbra pero el paso del tiempo hoy limita y el verte de nuevo se derrumba.

Y es que un día las estrellas iluminaban mi camino donde tu eras mi destino tus manos me atravesaron y en ellas tu belleza reflejaron
Tu dulzura, la más embriagadora y más pura, de todas las facetas de tu personalidad con esta duda mi cordura.

Y es que tu belleza no es solo exterior también se encuentra en tu interior tu mente, lo que a mí más me encanto partiendo en dos mi percepción desde el interior de sacude y juega con mi razón.

Pero ya es tarde ¿no habrá otra cita? Vives en mis memorias conservada, observare en la noche al cielo que me invita a recordarte entre fugaces luces estrelladas