Mi ciclo vital
Cuando la tarde cae las flores se marchitan,
llega el amanecer y sus pétalos se inundan de la escarcha,
sale el primer sol de la mañana y sus hojas reflorecen
y nuevamente por la tarde languidecen.
Así es mi vida. Algunas veces mi cuerpo pide marcha
y otras, las más, presiento que dormita.
Navego entre las aguas procelosas
de mi tumultuoso océano personal e intransferible.
Por más que busco entre las rendijas de mis losas
no hallo ninguna que la pena merezca y eso es triste.
Mis ojos son el reflejo de mi alma
y mi alma lucha consigo misma inundada de recuerdos,
-en un intento vano trato de separar los malos de los buenos-.
pero, como siempre, después de la tempestad viene la calma.
Ya la tarde está al caer. Y el infinito
difuminado se refleja y languidece en mi mirada,
cojo mis bártulos y sigo andando despacito
a la espera de que quizás también amanecerá mañana.
Comentarios & Opiniones
Saludos mi querido amigo. Tu pluma de nuevo se luce. Preciosos versos. Besos con cariño.
delicados y sinceros versos, saludos
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