A Horus y Egipto

poema de Lobo Gris

¡Oh majestuoso horus! ¡La belleza exaltada, la representación de la cúspide del desarrollo humano! los hombres y mujeres animales a hombres y mujeres inmortales, ¡Tu gracia divina! Surcas por los aires de la libertad desprendido de este ¡Maldito y bendito mundo físico! ¡Todo lo ves! trascendiste ¡Este maldito velo! ¡Esta maldita ilusión!

Una lágrima discurre con esperanzas marchitas ¿Acaso es posible romper el velo? equinoccios y solsticios, vidas regidas por las estrellas, Nilo desbordante, templos sacros, cuerpo, mente, espíritu, letras sagradas, vidas sintonizadas con el cosmos, pináculo de la existencia...Sacerdotes y sacerdotisas ,sabios y sabias de los principios que gobiernan el universo, ahora tus palacios hechos pedazos y añicos por la nostalgia de los tiempos, recuerdo melancólico de lo que fuiste un día, tu historia tergiversada por egos y mal interpretada por tontos, la arenisca y el calor latente te envuelven, una muda silenciosa esfinge relojera aferrada póstuma a tu partida...

Lamentos trágicos de una alma que no concibe el colapso de tus dinastías con tus faraones, ¿porque occidente de suertes ingratas? Destino caprichoso o razón cimentada de ciclos ¿Vidas perfectas de imperfecciones? grandeza sopesada en infinitas admiraciones ¡Te fuiste! ¡Carajo! ¡Ni modo! ¡Algún dia te comprenderán!