Cuando sufre el verso.

Qué triste se pone
el verso cuando sufre,
cuando llega una lágrima
y lo destruye,
cuando le parte el corazón
con un golpe despiadado,
y deja que su sangre
manche cada letra...
cada folio enamorado.

Se apodera el dolor de su poema,
y la mano del poeta
tiembla en cada palabra,
ya, no acentúa la alegría
porque, ahora es pena
y la tinta queda seca…
en un suspiro que no acaba.

Qué tristeza hay en el verso
cuando sufre,
cuando, le duele…
el cuerpo y el alma,
y la luna mengua
cuando era crecer
lo que le tocaba.

Regresará el amor al verso
un día, cuando no lo esperabas,
y la mano del poeta
volverá al folio enamorado,
donde su corazón…
nuevamente se desgrana.

Lo llenará de ternura,
de besos, que en abrazos acaban,
el poema llorará de gozo
y la alegría…
volverá a ser acentuada.

Qué triste se pone el verso
cuando sufre,
y que tierno…
cuando ama.

Téura