Correspondencia a Mauricio 1

poema de Lunática

Buenos días
Buenas tardes
Buenas noches

¿Te has parado frente al espejo,
te has notado y has visto en tus propios ojos el vacío desconocido y oscuro?
Me preguntó mientras me observo, desnuda, con frío. Casi debilitándose mi rostro, al no encontrarme ahí.
Me preguntó si tú depresión es igual a la mía.
Que si en tus crisis, lloras.
Si alguna vez en este último tiempo me recordaste, llorando.
Si al menos me recuerdas.
Los pensamientos me agarran desde el pecho, y me golpean.
Cómo si yo estuviera acostada, derramada en el piso, y solo vea las patadas. Y solo las sienta. Cómo cuando estaba en una pelea callejera.

Mi mente decidió escribirte, quizás algún día leas esto.
Desde que no estas en mis días, estoy anemica de lagrimas.
Y solo el pecho sigue vivo, pero no precisamente feliz.
Ojo, mi cuerpo a decidido parar en todo sentido.
Mi ciclo paro, y ya mis brazos no quieren recibir un pinchazo más.
Las pastillas sé convirtieron en mi cruz.
Los cuentos para dormir, casi siempre me recuerdan a vos.
Ya no te pido que vuelvas.
Solo quiero que no te olvides que una vez, me hiciste feliz.
Y que al irte absorbiste cada halo de luz.
Que aunque nlo niegues, (amor) Mauricio, siempre seremos.
A la distancia.
En los sueños.
En el deseo constante de volverte abrazar y en el deseo cobarde de querer olvidarme.
En el olor a café.
En el domingo, cuando despertabamos abrazados, y el sol cabía por la pequeña grieta que creaban las cortinas. Chocando sobre tus pelos.
Y sobre mis ojos. Que encandilados se esforzaban en no dejar de besarte los tuyos.
Cada día que pasa, cada día que escribo. Entiendo que yo jamás podré olvidarte.
Estoy condenada a una cadena perpetua, pero sin barrotes y desde la comodidad de mi cama.
Lo más horrible de esta, es que todos los domingos ruego por la pena de muerte.