Otra vez el tiempo

poema de David Morel

Otra vez el tiempo
se le enmarañó en el rostro,
y las orejas se le
quedaron a oscuras.
Eh! vagabundo,
¿de donde te crece
tanto silencio y tan negro?,
¿ya no hay filo
que te quite de mi espejo?.

Que de la tierra me sube
por la carne de los pies,
la noche a que camino.
Es eso lo que ves crecer.