Far over the misty mountains cold
Aún recuerdo lo que trajo con su vuelo:
la luna ardiente en el cielo,
las cenizas en el suelo,
a los muertos largo duelo;
y ahora la bestia guarda el oro con celo.
Desolación sobre una ciudad que ardió;
nada más que eso dejó.
Su crueldad tanto quitó
que hasta el negro humo ahuyentó.
Desamparado un pueblo que se exilió.
Y aún así, hermano, no te deprimas.
Nubes rasgadas por cimas,
gélidos y duros climas,
grandes alturas en simas.
Añadiendo iban a su canción más rimas.
Manteneos, mi pueblo, por siempre unido.
Negro el bosque recorrido;
de elfos su hogar siempre ha sido
y de criaturas su nido.
Y para su canción más dolor sufrido.
Ya ha pasado el peligro, familia mía.
Pero huir, ¿de que servía?
Cualquier fortuna vacía
y cualquier tierra baldía,
porque solo el regreso silenciará la canción de la montaña fría.
Comentarios & Opiniones
Me encanto tu poema, amigo y poeta. Abrazo con respeto.
Gracias, Casaluna, me alegra saber que te ha gustado. Te mando un abrazo también
interesantes letras,buena rima y música poética,un gusto leerte saludos.
Magnifica obra llena de sentimiento y buena musicalidad
Un gusto leerte
Saludos y amistad sean para usted...
Gracias por tus palabras, Jaime Regal. Intentaré no perder esa música y esa rima.