Comprendí que...

Empecé a ver las cosas de otra manera, quise dejar apartadas las convicciones y empezar a sentir realmente lo que viene siendo la vida.
Aprendí a observar en lugar de mirar, que ojos tenemos todos pero corazón sólo unos pocos de tantos.
Descubrí que la empatía te hace madurar y vivir distintos puntos de vista, que la alegría viene marcada por momentos, personas, caricias, abrazos, viajes y no por objetos o tecnología.
Exprimí los segundos para hacerme un buen zumo de tiempo ganado, de experiencias, de sonrisas, de besos en la mañana y cafés por las tardes.
Aguanté lo inaguantable procurando que no me dejara un mal sabor de boca, y me ayudó a crecer para seguir adelante.
Comprendí que la vida es efímera, un regalo y como el mejor regalo que tenemos todos aprendí a compartirla para conseguir entenderla.

Comentarios & Opiniones

Joelfortunato

Bella obra de especiales reflexiones sobre el curso y evolución de la madurez tanto de la personalidad como de la existencia en su importancia filosófica. Un gusto es seguir sus letras. Siga compartiendo su noble arte.

Critica: