Dicen que las penas matan

poema de María

Dicen que las penas matan después de tanto sufrir
pues si las penas mataran yo no podría vivir.
Desde que me faltó mi marido he dejado de vivir
soy una muerta viviente que no sabe donde ir.
Busco por toda la casa y ya no sé donde buscar
aunque está todo vacío, yo no lo puedo encontrar.
Me dijo cuando se fue, "pronto voy a volver"
y han pasados muchos años y yo no lo he vuelto a ver.
Me acerco a la ventana, veo campo y veo el mar,
y veo a las gaviotas que no dejan de volar.
Gaviota gaviota, si quieres saber mi pesar,
vuela hasta mi ventana y me puedes consolar.
Por qué estoy siempre llorando, nunca dejo de llorar
esperando a mi marido que no acaba de llegar.
¿Donde está mi corazón, donde está por qué no viene?
Qué angelito allá en el cielo tanto tiempo lo entretiene.
Te quiero mi compañero, te quiero donde quiera que estás,
te quiero mientras respire y más allá de la eternidad.
Recuerda mi corazón que me tienes que buscar,
porque para irme contigo, no sé que ruta tomar.