Noche de mierda

Otra vez, sus manos, sus labios tan fríos,
Aquel monstruo que me atormenta
''No saldrás de acá'' dijo esa voz ronca
Con tan solo un ''hola'' se escuchaba su voz perversa.

Caía en su juego, me tenía a su merced
Era su sumisa, sin duda alguna,
me buscaba cuando quería diversión disfrutaba tanto de mí,
complacía sus necesidades conmigo, no tenía compasión.

Caían lágrimas de mi rostro,
mientras él solo sonreía
le encantaba mi sufrimiento
recordaré aquel día que me hiciste tuya a la fuerza
Sin piedad alguna.

Sus labios recorriendo por mi débil cuerpo
me dabas tanta repulsión
cuando será el día que pagues
Por lo que causaste en mí.