El museo de la verdad

Voy a dormir hasta partir el recuerdo
A construir puentes en forma de espiral
Hoja seca que al crujir exclama al viento
castillos de arena enterrados por estos
en un pasado otrora pulmón estival.

Seré...
punto cardinal que apunta a la estrella
piel del monte con resaca del planeta
Tijereta triple mortal
relato de náufrago que nunca encontraron
Un granizo graznado y desleido, Color acaecido.
Borbotones de cantos que ruedan por las cuerdas del arpa a la vera del camino.
Espuma henchida del río, gaveta de meteorito y alegoría a madre selva.
Canto de sinsonte, Pasto de vaca marina, Arena calcinada del desierto, Corral de perlas
Fulgor en cuatro esquinas, epitafio fe de erratas
Porteador del ocaso, trasto de trasteo, y carta perdida en el correo
Sinalefa diacrítica huérfana e implicado del enigma de la montaña.
Fragua de la piragua.
Notas altas de octanos.
Rastrojo rutilante.
Aleteo de pólvora.
Ariete de vorágines.
Morisqueta del destino.
Sombra chinesca del fuego de quimeras de papel.
Emprésitos vetustos de ceniza dormitados en el tremor del volcán
y lágrimas hechas dolomitas.
Ballet de hoja que lleva una hormiga.
Votante de los colores del arcoiris.
Desliz de aprendiz.
Estocada estridente de hit de orquesta.
Perfume de huellas.
Risa burlesca en la comparsa.
Carrera de caracoles en pantanos de panteones.
Trago de luz en brechas de hojas.
Afrecho cabalgante en la ola.
Faro disoluto en el mar.
Gota congelada en el frailejón.
Aforo del coro de la laguna y de cirros que en el cielo gorgogean.
Estalactita de pensamientos
Salto de aguja del disco al final de la sonata.
Telonero del monumento del momento.
Vacío inerme hecho de cosas.