Colores y Sonidos

poema de Maniloe

Los coches vuelan tras la puerta de mi cochera,
los pájaros velan sus nidos abandonados
llorando por la primavera que se fue,
sobre las velas apagadas de sus altares
una vecina se esmera inútilmente
en sacar brillo a su puerta oxidada entonando música sacra
mientras yo la miro con lágrimas en los ojos
escuchando en silencio
el entrecortado vaivén de su respiración.

Conozco la letra de esa canción,
me lamen las manos las lágrimas de sus indulgencias,
pero no puedo llorar por ella,
porque por sus venas corren los huesos de las necesidades
que nunca se molestó en alimentar
y que ahora se ahogan en su cabeza prisioneras de su mediocridad.

Comentarios & Opiniones

La Dama Azul

Cuán expresivos versos los vuestros, llenos de un matiz que se disfruta leer una y otra vez.
"Conozco la letra de esa canción,
me lamen las manos las lágrimas de sus indulgencias,
pero no puedo llorar por ella"...
Saludos cordiales

Critica: