Tercer balbuceo, séptima lucubración: de un niño regañando a Kant. Quizá un niño bigotudo.

poema de Incipit Luis

Sostén la pluma
e ízala al aire
que no se pueda insinuar
que no eres nadie ni que
el aire no es camino para tus pies
sostén tus ideas con aire imponente
sostenlas bien alto cueste lo que cueste
sostenlas sobre tu cabeza pero nunca en ella
que sean de dominio público y firmadas con tus huellas
sostente a ti mismo y susurra a tus orejas
que no hay palabra mal dicha que no estuviese peor
muerta.

Autor: Luis Periáñez Llorente
Poemario completo en:
https://www.academia.edu/9577471/Tres_balbuceos