Para ti, hombre...de parte de una mujer

Existen hombres que con palabras afables
logran transformar en colmena de almibarada miel el corazón de una mujer,
aquellos que nunca van delante sino al lado apretujando suavemente esas manos necesitadas de ternura, los que con sólo una mirada pueden decir ;¡te amo!
Los que no se avergüenzan de acariciar tu cabello en un gesto sublime de amor, estimulando la sensación de mimos que pueden, en un instante, hacer alucinar a los sentimientos más rebeldes.
Existen hombres realmente sensibles, profundos, honestos y maravillosos. No hay que prejuzgarlos, ni descalificarlos, porque en ciertas ocasiones cometen errores al igual que nosotras; el ser perfecto y único no habita la Tierra y eso, hay que asumirlo para poder convivir y perdonar en caso de un conflicto.
Están, los que no te narran sus dificultades, eso no significa que no te quieran sino, simplemente,
desean ahorrarte sinsabores; justamente porque te aman demasiado.
Los que siempre buscan un tiempo para compartirlo contigo y cuando llegan, te iluminan con su sonrisa, con un gesto cálido, con un beso tierno…
Los que tienen un mensaje certero y te expresan en pocas palabras lo que realmente aspirabas escuchar.
Los que te encierran entre sus brazos y te mecen en una actitud sublime de protección, los que dicen sin pudor que te extrañan, recuerdan fechas especiales, o se disculpan luego de una discusión.
El que te mira directamente a los ojos y te trasmite con su mirada, un océano de paz y un torbellino de sensaciones.
Existen hombres que te halagan con poemas, que te cautivan con sus escritos y engalanan tu alma
de éxtasis románticos, transportándote a un espacio fantástico.
Y está , el que sufre por amor, por abandonos o engaños, por soledad… porque ese ser tan emocional y versátil como nosotras ,posee un admirable corazón que en oportunidades debe enfrentarse a sus propios miedos o inseguridades.
Existen hombres , que al igual que las mujeres viven en constante búsqueda porque, la vida,
en diversas oportunidades, se transforma en un laberinto que dificulta la salida y entorpece la realidad.
Habita en la Tierra, ese varón inconfundible que ama su libertad pero, a pesar de ello, experimenta satisfacción cuando está encadenado al amor que lo colma y transporta, que le da plenitud, sacia sus afanes y apacigua sus inquietudes.
Si un hombre así se vislumbra en el portal de tu existencia, toma su mano y déjate guiar sin cuestionar, porque precisamos de ellos para sentirnos plenas, vivaces, vitales…Hazle saber
que para ti es imprescindible, porque te aseguro amiga que a veces , el silencio de la soledad es demasiado potente y, la braveza del vacío, es estridente.
Un saludo para todos esos hombres que con errores y con aciertos, con pequeños detalles o con apacibles momentos regocijan el espíritu de una mujer.