Pasaje del idilio

Un placer con un deseo vino,
fecundó y germinó sin espera de ser idilio
De a poco las ramas frondosas de una pasión fueron podadas por la desatenta erosión:
Lamento por la amistad
Lamento por la cordialidad
Lamento por el cariño
Lamento las cenizas de cánnabis con las gotitas de vino en el piso
Lamento por el olvido
Lamentos porque fuimos atentos
Lamentos por el último desganado encuentro
No lamento que se hayan enredado nuestros puntos
Pero confuso el cielo:
falsos y brillantes, de bisutería,
llovieron diamantes
por todo mi estimulado suelo...