¿A caso no lo oyes?

¿A caso no lo oyes?
¿No oyes al silencio enmudeciendo cuando
tus labios conjuran amor eterno en mí?
¿No oyes a su eco llegando profundo
como un dulce susurro donde más triste
y lejano me encuentro?
¿No oyes cómo todos mis sentidos
madrugan esperando ansiosos
tu deslumbrante llegada?
¿No oyes rebotando a tu hechizo incesantemente
en cada lugar de mi corazón, sacudiéndolo?
¿No oyes como mis preocupaciones mueren
cuando sobre ellas evocas vida con tu mirada?
¿No oyes resonante su presencia que llena
de verde césped y agraciadas flores mi casa?
¿No oyes cómo transforma todo en un paisaje
lleno de vida y ensueño?
¿No oyes la forma en la que maternalmente me abraza
cuándo incapaces son mis pestañas de aguantar
el peso de mis lágrimas?
¿No oyes cómo el destino en secreto alegremente
sobre nuestro amor canta?
¿No oyes a mi pecho estallando en llamas,
como un fénix renacido, cuando dices que amas?
¿No oyes de noche a Venus bendiciéndonos
tiñendo delicadamente nuestro amor con su magia?
¿No oyes las peticiones que le hago al viento
para que te recite cuanto te amo por las mañanas?
¿Acaso no lo oyes?