Ruedas de la vida.
En un rincón incomprendido, el caminante persiste.
Toda una vida de sufrir, herido pero resistente.
Recuerdos ajenos son su carga diaria,
Su alegría, el gozo de haber vivido en la adversidad.
En su silencio, esconde a un niño vulnerable,
Un niño mudo, incapaz de contar su propio silencio.
Las líneas de su existencia marcadas por la vida,
Una herida fatal, pero no mortal, ha encontrado.
Vivió plenamente, disfrutó el camino con tesón,
Más cansado y herido, son momentos sin explicación.
Pensó ser una historia vivida y concluida,
Hasta que una luz, una sonrisa, una niña toco sus pupila con su energía, toco su alma con su mirada toco sus manos con admiración lo hizo despertar de sus sueños lo hizo volver a reir lo hizo romper el silencio como volver a vivir.
A vivir sus emociones,
Sin juicios, sin ovaciones, solo deseando disfrutar.
Y Ese niño escondido en paisajes y calles,
En sustos y partidos, cosas imborrables.
Nada pudo controlarlo, ni el tiempo, ni las alegrías,
En silencio vivió, ahora ansía gritar sus melodías.
Gritar de la herida que lleva consigo,
Gritar que ya no puede más, pero sigue el abrigo.
Ha amado, ha querido, quiere gritar al viento,
Enfocado en sus días, años y cuentos.
No busca demostrar, solo seguir luchando,
Hasta que sus fuerzas digan basta, su destino abrazando.Es lo único que ha aprendido y es lo único que hará.
Comentarios & Opiniones
En esta ocasión me inspire en una historia de un atleta.
Plasme mis letras en honor a él, a sus marcas a sus logros y di rienda a mí imaginación.
Guau, me gustaron algunas de las líneas de tú poema. Saludos cordiales
dios que hermoso es leer algo así, gracias por compartir una parte de tu alma y tus ideas con nosotros. me encanta la musicalidad de el texto, más allá claro está, del contenido. un abrazo desde Argentina.
Buena tu imaginación Karen García y buen día tengas por Ecuador .
Salud.
Gracias por sus comentarios y por leerme.
Me siento identificado con ese niño de vuestros versos, algunos nacemos en la tormenta y un ángel no saca de ella. "Sin juicios, sin ovaciones, solo deseando disfrutar." Cuanta sabiduría hay en esa frase. Saludos compañera por este conmovedor poema
Abora muchas gracias, me llena plenamente su comentario y detenerse en el tiempo para leerme.
Acero etéreo ,tanta gratitud me inspira a seguir escribiendo, un abrazo.