Vos

poema de J

Cómo empezar a decir lo que dicen mis pesamientos?
Cómo poner en palabras todo lo que llevo adentro?
Cómo explicar que la vida, sin vos, no sería la misma?
Cómo poder soportar las noches largas sin "una" bien fría?
Y voy a ponerme sentimental, total? nadie me mira.
Éste homenaje, es pa´vos. No te rías de mis rimas.

Soy como soy y como soy me aceptaste.
Siempre escuchaste lo mío... y pocas veces me juzgaste.
Cada vez que necesité una mano, el cuerpo entero me entregaste.
No me alcanzará esta vida, ni mil más para pagarte.
Esto va para largo, por favor, acomodate.
Veinte años son muchos. Destapá "una" y escuchame.

Desde chicos hemos pateado, casi siempre, las mismas veredas
con "ring raje" y patadas, haciamos temblar las puertas.
La biblioteca aun guarda nuetras risas e inocencia
y el vidrio roto de la galería, aun suena en nuestra conciencia.
Qué buena infancia tuvimos! todos juntos, todos alerta,
para que el "robot" pueda secar sus medias en la vereda.

Pero la vida pasa y los años se acumulan
y en poco tiempo, nuetras caras empezarán a tener arrugas.
Sólo me queda un consuelo. Sólo me queda una cosa.
Seremos eternos niños, en nuestra intimidad, estando a solas.
No te aburras con la historia, pues es la tuya y la mia.
Una historia, de amistad, que soporta el día a día.

Todavía recuerdo tus palabras: "a la NN no la nombres".
Se podía ver, en tus ojos, que el dolor, siempre, tiene un nombre.
Tantos años entregados a un amor, a una causa noble,
dejan huellas, aunque a veces, quisiéramos que el viento las borre.
Quedate tranca que no voy a hablar más de esa historia.
Todo lo que pasó, quedará guardado en tu memoria.

Hablando de amor, es inevitable sacar el tema de los demonios.
Esos que rondan, siempre, con cara de ángel... cazando tontos.
Esa llamada, en verano, contándome tu dolor,
Fue como si estuviesen arrancándome el corazón.
En parte, fue culpa mía por haberte metido fichas.
Perdoname, amigo mio...no sabía lo que pasaría.

Y ahi, fue el punto de quiebre. Tu orgullo te traicionó.
Las palabras, que nunca dijiste, brotaron de tu corazón.
Gracias por haberme elegido para semejante confesión.
Fue un orgullo haber presensciado ese torrente de dolor.
Y aunque tus lágrimas no salían, yo las vi, no digas NO.
Tu corazón estaba roto y el mio lo comprendió.

Esto se torna largo. Perdoname, es el alcohol.
Sabés que mi corazón es duro y sin veneno no hay confesión.
No quiero volver a tocar temas que traigan dolor...
la hermana de aquel demonio, la dejo para otra ocasión.
Sólo me interesa que sepas el amor que siento por vos.
Yo sé que vos lo sabés. No hace falta explicación.

Qué descance tu cabeza, Varias veces, le pido a Dios.
Es mucho el peso que llevás...no seas gil! Amate vos!
Si a mí me pasa algo...la nena queda para vos.
Perdoná por semejante fardo...pero sé que, con vos, estará mejor.
Sólo pido que le enseñes a ser humilde, a dar amor...
sólo quiero que le enseñes los valores que tenés vós.

Comentarios & Opiniones

Falstaff

Aplausos y felicitaciones, que
"Pedazo" de poema, se vive, se gozaba se comprende.
Saludos cordiales "J"
Muchas estrellas para ti...

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