Noches eternas
Suena la campana de medianoche
La mesa está llena de botellas medio vacías
En los bordes se deslizan cigarrillos muertos
Los vasos llenos decoran la mesa
Entre sus miradas y sus sonrisas me siento tranquilo
Mi mente se esfuerza por grabar este momento
Quiero recordarlo en la eternidad
Congelar cada una de sus acciones y guardármelas para mí
Entre gritos y risas quiero fundirme y perderme
Cada uno de sus rostros es para mí fuente de alegría
Aquí no hay espacio para la oscuridad
Alrededor de la mesa se respira aire de entusiasmo
Nosotros tenemos un lenguaje propio
Nuestra afección toma la forma de frases como
¡Pásame un cigarrillo! o ¡Llénate ese vaso que está vacío!
Cuando el mundo se acabe y me quede un último deseo
Volveré a esa mesa con esa gente
Y soñaré que vivo eternamente esas noches de colores