Sutíl

poema de Faro

El poder de lo sutil, de lo más vivo
El estado más real del ser humano
Siempre vive encerrado y oprimido
Oculto tras las sombras del pasado

Tras la carga de las vivencias sufridas
Que levantan muros de defensa
Evitan el contacto con la vida
Ya no quieren más dolor en su existencia

Pero el hombre se marchita en el encierro
Va apagando su luz en la trinchera
El muro que separa al sufrimiento
Es el mismo que de a poco lo condena

Lo sutil sigue vivo, imperturbable
Inmortal, infinito como el cielo
Las tinieblas de este mundo vulnerable
No consiguen doblegarlo ni vencerlo

Ese es el tesoro más buscado
El amor encontrando la salida
Y no hay muros que puedan ocultarlo
Es la fuerza poderosa de la vida