Fue mi primer amor

poema de El Gori

Fue mi primer amor, amor de niño, amor adolescente, amor de hombre...

Verla era todo lo que quería, todo lo que deseaba; me enternecía, me estremecía, sentía en su presencia un gran vacío, vértigo, taquicardia, miedo, felicidad

Verla era suficiente porque la amaba...
Aunque ella no me viera a mi

Tenía ese pálpito de que ella también me quería, de que me andaba buscando, de que yo le hacía tanta falta como ella a mi...

Me volvió insomne, me hizo poeta, o quizá no, quizá tan sólo despertó al poeta que llevaba por dentro

Y le escribí...

Le escribí cartas y poemas, y se los envié con el pensamiento, con mensajeros imaginarios, invisibles, con palomas mensajeras.

Le dediqué canciones, muchas canciones, serenatas de ensueño sólo para ella, una tras otra...

Era una vestal, inmarcesible, inmaculada, nunca mancillada, idolatrada, casi imposible, casi inalcanzable, perfecta...

La adoré, le construí altares, la soñé mil veces, muchas veces, la acaricié, le bese la frente, el cabello, las manos...

La abracé tantas veces, tiernamente, con el alma, como a un pichón recién caído. Y lloró en mi pecho, lloró de amor en mis brazos, ambos lloramos, temblando, sin mirarnos, sin hablar.

Momentos perfectos...

Blanca, tersa, dulce, inocente, tímida, adorable; una niña, un ángel, única, irreal y mía sólo mía...

Nunca llegué a tomar su mano, pero me marcó, y me enseñó tantas cosas...

Y jamás la olvidé; nunca la olvidé...

Fue mi primer amor

JR
01.2.2018