REFUGIO
poema de Jorge Damián Pelozo

El susurro de un trueno se hace eco tras el cielo
y la lluvia se vuelve garúa intermitente,
el techo de chapa vuelca el agua en sus vertientes
que caen formando arroyitos en el suelo.
Dentro de casa mi madre hace las tortafritas
y yo estoy sentada en la puerta, bajo el alero,
cebando mates como diciéndole te quiero
y que mi alma de niña su consejo necesita.
Afuera se abrazan las gotas con el ramaje
y se improvisa una canción, un grillo escondido.
Veo un pájaro azul regresando hacia su nido,
mientras el viento encuentra refugio en su plumaje.
La sartén y la lluvia componen la melodía
y acompañan en coro la voz de mi viejita,
que entre cada mate con burrito y tortafritas,
me transmite con sonrisas la sabiduría.
Jorge Damián Pelozo





