Palabras

Dime, cuál es tu mejor cualidad, ¿estar todo el día sentado sin más que hacer que solo escribir ?, porque mentir, esa es, originalmente odiaba escribir, sin embargo el tiempo y los sucesos me orillaron a hacer esto, ¿porque soy escritor?, simple, porque odio reservarme las cosas para mí mismo y que nadie más las pueda saber, si, estas en lo correcto, mis índices de cordura están por los suelos, ¿pero dime que puedes esperar de alguien que no confía en nadie más que en su mente y sus sueños?, solo cierro mis ojos y veo un mundo alterno, completo y lleno de colores, y sin embargo mi mente sigue gris, estoy feliz y triste al mismo tiempo, pero no tengo tiempo de llorar o sonreír porque estoy demasiado ocupado tratando de averiguar cómo es eso posible, lo más que puedo hacer es resignarme a continuar una vida que por el momento no ha florecido y sigue en la espera de ese suceso fantástico que cambiara el curso de la misma, la vida fluye como un largo y hondo rió, y solo seguimos la corriente de este tratando no chocar contra ningún problema, pero el agua es turbia, y nosotros flaqueamos entre las brazadas que nos llevan hacia adelante, miramos a las personas al rededor y creemos que son felices, pero la sonrisa que portan es tan falsa como la mía, y si en ocasiones sonrió de verdad con completa sinceridad, es un momento fantástico y estridente a penas fugas y perceptible, pero, ¿acaso nos importa vivir tal mentira?, la mayoría ni siquiera lo nota y esa es la felicidad perpetua que nos libra de la muerte y nos lleva a la monotonía de la vida, es por eso que soy escritor.
Y a todo esto para que continuar escribiendo cuando algunos solo miran las letras sin comprenderlas, quizá en la inmensidad del mundo encuentre a alguien que entienda la relación entre la mente y las palabras y sepa responder esta pregunta, ¿por qué?, si, exacto, esa pregunta que no falta todos los días, y que sin embargo no sabemos responder, ¿Por qué no podemos responderla?, la propia pregunta es una alegoría a la infinidad de respuesta posibles a tal cuestión, sin embargo, no pierdo la esperanza de ver un nuevo amanecer en el que todo sea bañado por la luz embriagante del sol, ¿Que es mejor que una tarde soleada con una gran paz en el interior?, en los últimos años y a pesar de mi corta experiencia no puedo concebir la paz en mí, los sucesos que me acompañan quizá sean poca cosa para quienes experimentan verdaderos calvarios, sin embargo cada quien carga con sus propios problemas y no es correcto menospreciar el de los demás, aunque estos sean insignificantes, lo único admirable entre la tormenta es que a pesar de todo, seguimos aquí, de pie, esperando ese nuevo amanecer que nos brinde un poco de calma y continuar por el largo sendero de la vida.