De Profundis
¡Oh, noble belleza!
aún extraño la suavidad de tu piel.
No es sencillo vivir para mí
sin la libertad que tu amor me puede dar.
Mi corazón aún sangra
mis pies no recuerdan el andar hacia ti.
Atrapado estoy en un profundo vacío
mi mente no alcanza suspiros de vida.
La soledad es quien por las noches me abriga
los vientos del olvido se adentran por la rendija de mi alma.
Ceno en compañía de la oscuridad
me voy a la cama junto a la soledad.
Luna, Luna ¡pido piedad!
deseo a mi amor, poder recobrar
pues mi vida ya no es mía
hoy ya no vivo, tan solo existo.
Mis cadenas son tus palabras de adiós
mis murallas son la ausencia de tu amor.
¡Dulce nena!
¡Sácame de aquí!
Bella ilusión, mi ángel de amor
Espérame en ese lugar llamado nada
donde nuestros sueños podamos conquistar.
Aunque hoy comulgue con el silencio
el amor que siento por ti, siempre reinará.