El último caballero
Amanece y ya no estás en mi castillo,
despierto y me encuentro solo.
Envuelto entre la bruma
que cubre las montañas,
en aquellas donde se oculta silencioso,
el templo de una diosa pagana
La luna ya no me responde,
ya no quiere hablar conmigo,
y perdiendo su brillo,
trata de ocultarse
entre los verdes olivos,
Mientras ha noche moribunda
se aleja,
dejando paso a ese rayo de sol
que anuncia la mañana
Nubes grises se acercan
con colores de tormenta
que bañan en plata
ese arroyo de esperanza
que refleja mi armadura de hojalata,
y tú, tan lejos
de mis sueños y de mis mañanas
Cómo podré seguir escribiendo poemas sin ti?
Mi bella Dama.
Vagaré como un caballero
andante y moribundo,
en su corcel blanco
hasta donde el tiempo clama,
Hasta las mismísimas profundidades
de aquellas viejas montañas
Cabalgaré errante
bajo las estrellas
por los oscuros senderos
del olvido
como castigo
por haber perdido
a su doncella
Y allá en mi última batalla
por la vida,
por última vez,
le encomendaré mi alma
y mi corazón
pues la vida sin ella,
sin su amor y su pasión,
ya no tiene motivo
ni razón
.....de un halcón