Poema V
Es inútil;
no me despertará la mañana ni el goce de la noche me traerá su calma:
estoy hecho de trincheras, de incendios
que parecen distantes jugadas al borde del universo.
Soy opaco a los guiños del sol;
no conmueven mi pesada sustancia los relámpagos que braman la tormenta.
Así he pasado los años.
La ciudad que tanto amé quedó cercada como una barca a punto de caer:
alguien se apodera de ese pájaro que vuela hacia el sol,
y seduce.
Yo vi el amplio corredor de estrellas estampado en la distancia;
me interné en la selva entreabierta a esperar el sermón de los muertos,
las brasas apagadas de la despedida.
Obtuve, sí, la sorpresa de mi fuga en tránsito,
y el calendario de agua visitado por el tiempo.
Sospecho que algún ángel brotó su sangre
y me baña de color hasta sangrarme.
Comentarios & Opiniones
Excelente, muy bueno. Un placer su lectura.
Saludos.
Bien hecho, buena muestra de alta expresividad, incluso evoca en algo a Hiroshima o la Roma de Nerón. De buen ritmo y colorido agradable en su lenguaje justo. Un gusto leerlo. Saludos y amistad le envío.
Un gusto leer sus excelentes letras. Saludos
Juan O.; Joel; Leticia; Päblo:
muchísimas gracias por haber leido; cuando se reciben saludos como los de Uds. el corazon se ensancha.
Guille