Perdona…

Perdona,
Si sólo digo te quiero,
Sé,
Con esto no consigo
Que tu alma salga ilesa del duelo
Que sostienen aun contigo,
Tu razón y tu corazón.
Cuan culpable te confieso
Que me siento y he sido,
Al pintar tu claro cielo
De un pálido color,
Nubarrones de tristeza
Y alboradas de dolor.

Perdona,
Si sólo digo mi amor,
Sé,
Con esto no destierro
De tus ojos el cruel llanto,
Tan acerbo, tan sincero,
Que ensombrece a tu rostro
Y es tan frio como el hierro.
Cuan culpable te confieso
Que me siento y he sido,
Al tornar tus dulces sueños
En infames pesadillas
Que no mueren con el sol.

Perdona,
Si sólo te pienso,
Sé,
Con esto no se amengua
De tu cálida esencia
La nostalgia que sin tregua,
Resquebraja tu ilusión.
Cuan culpable te confieso
Que me siento y he sido,
Al entrar así en tu mente
Y decirte sin pensar,
Que te pienso como siempre
Y te nombro al despertar.

Perdona,
Si sólo te escribo,
Sé,
Con esto no se calma,
Ese caos en el mar
Apacible de tu alma,
Ni el estrepito de olas,
Que a tu paz golpean sin cesar.
Cuan culpable te confieso
Que me siento y he sido,
Al profanar de tu aire
Los resuellos de tu amor,
Que alimentan de suspiros
Este agónico dolor.

Perdona…
Sólo perdona,
El sonido de estos versos:
Quimeras aladas de mi pensamiento,
De un corazón que aun muriendo
Musita entre arrullos,
Que tu amor es bello.
Tú lo sabes,
Lo presiento,
Porque hoy donde me encuentro
Apretando en estos labios,
Silabas en gotas de tus ojos desechos,
Que acallan humildes este lúgubre tormento,
Que es tan tuyo, como mío…
Hoy amor, te lo confieso
Que sumaré a este sentimiento,
Lo culpable que me siento¡