De vez en vez

De vez en vez, mi espíritu errante taciturno
Busca la lluvia de tu cuna, en tu regazo la premura indulgencia
Y en su suplicio vergonzoso bate su lamento en el piso y te mira
Solo soy un vago de las cordilleras,
Al parecer del resto me expongo como un necio trasnochado,
Aquellos, los elevados por la experiencia, sátiros de la nervuda noche
Se inflaman al proferir que mi lucha es un gran derroche

De vez en vez, la postergación delimitada por tu mano me pierde
Ante una luminiscencia inagotable, me pierden los desvelos
Y las nubladas selvas, me pierdo del ruan y de las bestias
Terminadas por la omisión quedan las conversaciones obscenas
El siniestro espanto se aflige por el fulgor que tu presencia libera
En un desinhibido amor sincero, del cual no tengo exigencias
Me parezco a un niño caprichoso consentido por su padre
Amado infinitamente, lozano vuelvo a mirarte
Tu grato brazo me lleva a acomodarme entre los vástagos primeros
Los cofres se abren con espontaneidad, los tesoros desvestidos a plena vista
E intocables se funden y puedo beberlos.

De vez en vez,los glóbulos son brazas ardiendo que no me permiten decir
“Todo está perfecto”
Unidas todas crean fuego, su fuego arde en mi pecho y mi pecho no contiene
Su fundamento, enganchada mi boca lo grita, si calla las ascuas pueden consumirme y hacerme cenizas,
Esas veces son de siempre, adheridas a los minutos, todas son tuyas,
fluorescentes en la nebulosidad, estallando en el reposo de mi cuerpo
Despertándome del sueño al que me había conformado
indicas sobre la cordillera caminos furtivos estimados solo sobre lo encumbrado
Manifestando la calzada a mi espíritu severamente, de una sola vez.