El que es

El que a partido no es igual al que hoy a regresado,
porque ya no soy más el que hace tiempo he sido,
por qué el conociste se ha perdido y el que regresa es un desconocido.
A fuerza de castigos, de latigazos, de decepciones he aprendido,
(este que tanto te ha querido) que los besos recibidos
no tenían amor y por no decir todos, la mayoría... eran fingidos.

Lo que retorna es esto, restos irreconocibles de lo que a vivido,
invadido de puños apretados y de sentimientos extraviados.
De mí no se va a obtener nada, todo quedo en algún camino,
en una zanja, en las grietas de una piedra, en algún ripio,
en el fondo de un precipicio y su infierno, el que no puedo escalar,
el que se encuentra en el confín más profundo de mi propio abismo.