Y así te fuí teniendo

Y así te fui teniendo:
entre la esperanza y el sueño despistado,
entre la alborada y amaneceres tenues
que nunca mueren con el Sol,
en el despeñadero de un mar bullicioso,
en la huída trémula de un deseo enmudecido,
en un repentino salto a las estrellas
y en el sueño intrépido de un poeta enamorado…
Llegué a ti para quedar libre
del tiempo cómplice del amor,
para extender mis manos a tu cara bonita,
y me he quedado en ti,
amor de magia, sueño vagabundo
donde tu cuerpo insaciable late en mis latidos
y como un designio misterioso, yo estoy en ti,
esperando siempre el viaje a tus caminos
y la llamarada azul de tus ojos vivos,
así fuimos cruzando cielos
surcando océanos en un navío blanco…
Tú mi amor, mi romántica cita
para endulzar las voraces y frías noches,
más con sed infinita de nuestras
almas amantes
fuimos sosteniendo nuestros ojos fijos,
tan penetrantes que se aman desde afuera.
Edwin Paul ©