Trans

La luz generosa se desboca, anuncia ruedos y ruegos.
la primavera que reniega , presa en su yema de rejas,
desde muy adentro, se carcajea la sexualidad risueña.

La niña purpura que nos llama, tamborilea lenguas ocultas,
Una piel que se arrepiente , gira en caracoles de certeza.
Arropada en ropas ajenas, una canción que ya ruge,
clama incendios, identidades sin fronteras.

Ese café indígena, saborea sus estrellas,
repica en su coraza, adioses de marfiles coloniales.
Pujante luego se escapa, vaciando la piel de cera.

Aguas trans que rugen en túneles, calderas de levadura vieja.
Lo mejor de nosotros transcurre en los fermentos,
Y así de pronto, explota en mieles, los satélites de vida nueva.