Nombrar
¿Qué nombre le hubieras dado tú al primer rayo que tocó el suelo?
Tenía yo unos diecinueve cuando lloré con una canción de Gustavo Cerati.
Escuché: "tu verbo vive en mi carne",
y lloré con muchas canciones de diversos artistas,
pero esta tenía algo especial. Hoy sé lo que es,
conozco el nombre de lo que despertó mi llanto.
Eufonía.
"tu verbo vive en mi carne"
simplemente una maravilla prosódica,
tu VER-bo VI-ve en mi CAR-ne.
La V viviente y vigorizante de Verbo y Vive.
La combinación de vocales abiertas (a, e, o) con cerradas (i, u)
le mecen en un vals, un vaivén.
Ahora lo sé, antes no.
Ahora lo sé,
sé dar nombre a las cosas,
y por sobre todas las cosas sé,
que todo nombre dado hace ser a la cosa,
y no viceversa.
¿Qué nombre le darías tú a la primera gota de lluvia que tocó el suelo?
Éramos un susurro onírico de los albores,
dicho de otro modo, jóvenes.
Por aquel entonces te amé, y me amaste.
Lo sé.
Y más cómodo fue darle nombre
a la oxitocina o a la dopamina,
fluyendo del sudor hasta las sábanas.
Y pido perdón,
nunca supe yo a qué estamparle
el nombre del amor.
¿Qué nombre le darías tú a la primera llama?
El primero que conocí fue en una calle aleatoria de Rosario del Tala,
Medio le decían, nunca supe por qué, la verdad.
quizá fue para muchos mitad de hombre mitad de poeta.
Hablamos mientras... no.
Mientras hablamos nos pasábamos la botella de birra,
terminamos en una cancha de básquet,
saltamos la valla y nos quedamos allí,
viendo el amanecer, compartiendo escritos y borradores.
Conocí otros como él y no fui yo sino el mundo,
quien les puso nombre: Locos.
Dos están muertos y otros peor que muertos.
yo loco y muerto estoy,
Pero les di otro nombre,
Artistas.
¿Qué nombre le darías tú a la luna?
Séptimas.
Nombre que le puse a la sensación del piano interminable,
rogando porque vuelva a la tónica, al reposo, a la
calma.
Y así pasó mi vida empotrada en nombres,
quizás necesarios pero irrelevantes,
no, perdón.
Triviales.
Etiquetas para todo en todo tiempo,
porque querido lector, esa es otra,
todo tiempo no siempre fue mejor.
Y no lo fue por falta de nombres,
o quizá hoy, tanto nombre a todo es peor,
nostalgia.
Le dijimos a él recuerdo cuando es alegre y vibrante.
Estamos solos, lector,
solos como migas en el piso,
como cajas de pizza en un montón,
como carcajadas a piel erizada.
Solos, lector, solos.
Y estamos bien con ese nombre: soledad.
¿Qué nombre le darías tú a un poema anónimo?






Comentarios & Opiniones
Me ha encantado esta obra, con esa incertidumbre y cuestionamientos propios de las mentes intelegentes, se aprecia el talento, el arte, la cultura en cada verso, un gusto la lectura estimado Poeta, abrazos cordiales, feliz día...un poema anónimo sin
dudas brotó de un corazón repleto de sentimientos, no es preciso darle nombre, en cada verso está la esencia, el alma, la entrega de la sensibilidad del poeta que se entrega a la vida, a la naturaleza, al amor....Gracias, bella obra.
..inteligentes""" disculpa.
viniendo de semejante poeta, es un alago tu comentario Xio. que te leo cuando necesito un impulso para seguir, o escribiendo o viviendo. un enorme abrazo y gracias por pasarte, recibo con agrado... no. con el alma abierta tus comentarios.
Gracias, es un honor que le haces a sencillo decir, abrazos, Feliz noche.