Mala suerte.

poema de Atlayxes

Te odio por ser tan indeciso y no tener una minúscula idea de lo que deseas en tu vida.
Me odio a mi misma por haberme cruzado con tus ojos,y por haberme atrevido a indagar más en ellos, y a varios metros de distancia en vez de ver, saborear en mi lengua el sabor que tienen esos dos.
Parecía que seguías tu juego e insistente, sin intención de dejarte perder, insististe hasta que mis ojos cafés no pudieron resistirse más al juego de tus olivas paseando por toda la habitación.
Ahí vas, caminando por todo el lugar, acechando con tu vista tal cazador. Esperas la mínima oportunidad, se que vienes precisamente en esta dirección. Mis ojos ya adentraron demasiado en los tuyos y tomando un poco del supuesto pudor que tenían, agacharon la mirada y se alejaron lo más posible del caníbal que se negaba a dejar de acechar. Buscando su presa.
Intento repetirme siempre no ver más allá, no ilusionarme en lo que pasará, ni en lo que mi mente divagante se empeña en crear a modo de escenas ficticias que afectan toda mi visión.
Al fin llegas al lado mío. Hasta acá te puedo sentir a ti, conteniendo la respiración. Esperando acercarte más para dar un paso y completar con el festín qué, sin mucho trabajo de tu parte, conseguiste hoy.
Yo estoy nerviosa y sudo de todos lados. Me niego rotundamente a ver una vez más ese par de ojos que tienes tú.
Me temo que si los vuelvo a ver, ahí me quede atrapada y nunca pueda, ni quiera, salir de esos dos.
Siento tu presencia, insistente. Tu cuerpo cambia de posición, lo siento bajo el colchón. Timidamente te acercas más a mí, fingiendo acercarte para abrochar la agujeta de tu zapato.
Ya, fue inevitable. Sería un pecado negarme a ver tus ojos tan únicos, divinos que ahora siento que me penetran y me centran totalmente en ellos.
Te presentas, me presento, tomas mi mano y en el dorso tiendes un beso suave, rápido que se sintió como un rayo entrando por la punta de mis dedos, que me impidió soltarme o tan siquiera hacer el intento de liberarme de tu prisión.
-Que bonita te ves hoy.
Sin importar a que lugar vaya, nuestras mentes se ponen de acuerdo siempre y deciden algo entre los dos. Lugar que vaya lugar que me encuentro contigo, y aunque creerías que eso es mala suerte yo sigo creyendo que es una bendición.

Comentarios & Opiniones

almar

Bien lo dices, la historia no va de tener buena suerte. Es un buen escrito Diana. Mis estrellitas para ti. Un besote muy fuerte desde España ALMAR.

Critica: 
almar

Te estoy siguiendo amiga, y te invito a que me leas. Otro besote desde España ALMAR.

Critica: