“De niña a mujer”.

Adorna tu flor con un toque de sexo,
olvida el sudor y acepta mi cuerpo,
escurre tu mano al ser que te espanta,
y admira el calor que en ti se levanta.

Pervierte tu infancia y olvida tu niñez,
olvida los juegos que llegó la adultez,
asume conmigo tu miedo agitado,
y sonríe mujer que ya estoy a tu lado.

Escucha el rompiente que sueltan tus labios,
y no grites que ahora yo soy tu santuario,
asalta conmigo el temor al futuro,
que ahora es que estamos los dos al desnudo.

Sonríe mujer y olvida tu infancia,
que ahora en tu alma entró la maldad,
olvida el pasado y ve la distancia,
que existe entre niña y mujer de verdad.