Cuando se marcha la memoria

Vengo de recorrer y perder mucho en el camino,
olvidando en el regreso el propósito de la partida,
y la endeble memoria que permanece conmigo,
se retira sin más con un silencio que no olvida.

En la distancia sombría se revelan las cosas,
que frente a uno jamás se mostrarán claramente,
lecciones que se aprenden con la memoria lejana,
de un sendero que te lleva a comprender perfectamente.

Vengo de recorrer los excesos del camino,
habiendo estado a la deriva y completamente desprovisto,
y la memoria maltratada lanza un último acertijo,
para que entienda de una vez, que hoy me pienso, pero no existo.

Aquí se queda finalmente el último trazo del sendero,
de todo un tiempo que inmoló sus viejos sueños y sus glorias,
en la distancia que se fue, lo prometido, nunca fue sincero,
por un camino que acabó cuando se marcha la memoria.