Siete horas

En el decibel que deja el pétalo de una rosa al caer,
las letras, los sentimientos,
las sombras y el comienzo de un sueño;
dicen, cuentan, que ese universo ínfimo,
ese plano difuso,
pero no por ello falto de magia,
descansa la joya que se destaca por el festivo y elegante sonido de su nombre,
un nombre que cala en la fructífera noche
que guarda la voz singular de una semidiosa...

Un nombre que es una llave,
un sonido que apertura la magia,
la fe y el suave trinar del dulzor,

Un nombre que es cercano
aun encontrándose en lejanía relativa.

Un nombre ubicuo,
en el latido,
en la faz de una luna que no quiere menguar...

Comentarios & Opiniones

Cafe de Antaño

Que profundas rimas, muy atrayentes como el menguante de la Luna. Un saludo!

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Centinela Azul

Gracias compañero, tu visita me levanta la moral...

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Xio

Que preciosa, que emoción acompaña al poeta con ese nombre como estandarte, con ese nombre como única razón...un nombre obicuo,en el latido, en la faz de la luna que no quiere menguar...qué te digo?? Un placer querido amigo, abrazos cordiales David.

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Centinela Azul

Muchas gracias dama Xio, muchas gracias...

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IARA MARÍA VILLEGAS

Muy bella obra, saludos.

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Centinela Azul

Dama Corazón, muchas gracias por su comentario.

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Centinela Azul

Dama Iara, muchas gracias por su presencia...

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Erasmo

Grande David. Un poema enorme. Ese nombre quizá sea nuestra real denominación.

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HEHO

" para ver el mundo en un grano de arena y el cielo en una flor silvestre, abarca el infinito en la palma de tu mano y la eternidad en una hora" me hace pensar que cuando escribiste este poema mirabas algo pequeño algo en lo que nadie más reparó.

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Centinela Azul

Erasmo, hermano, muchas gracias por tu visita...

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Centinela Azul

HEHO, hermano, halagado estoy por tu visita, un abrazo... Muchas gracias.

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