Matiz

Una mano enterrada,
un servil modo de morir;
un cuerpo cansado de su cabeza,
una forma reiterada de no existir;
la cabeza funcionando,
el corazón encerrado en una cárcel de fuego,
en una habitación de irrealidad...

Los ojos solo pueden ver,
la boca decir, ingerir,
los oídos escuchar;
pero nada funciona como debe,
la boca está censurada,
los ojos expuestos a la brillante y falsa deidad,
las orejas sordas de tanta explosión sin finalidad,
lo que queda es sentir,
sentir la verdadera paz de lo sideral,
sentir sin latitudes
el suave latir de lo eterno,
el ciclo perfecto,
la nativa canción de lo que es total...

No somos piedra,
no somos agua,
no solo somos hambre o sed,
somos hermanos de lo real,
lo que origina lo universal...

Pero somos aún un pedazo de mundo
que se muere de no volar...

Nuestras manos atadas,
nuestras bocas selladas,
nuestros ojos viendo lo que no deberían ver,
nuestros oídos sin percibir lo que es natural,
quedan atrás...

El latido,
nos hará reinar en donde merecemos reinar,
nuestra luz no vendrá de otra mentira más...

Soñar es vivir,
vivir en realidad,
es la sencilla existencia de lo original...

Comentarios & Opiniones

Artífice de Sueños MARS rh

Bienvenida para sus reflexiones mi estimado.
En el dintel de una escuela de misterios, dejaron escrito:
"Si tenéis luz de verdad, no seréis engañados".
Hasta nuevo poema.

Critica: 
Centinela Azul

Gracias por la bienvenida, hermano...

Critica: 
María del Rocío

Que belleza de poema amigo Azul, toda una maravilla de letras llenas de pasión y sentir

Critica: 
Centinela Azul

Gracias dama, muchísimas gracias por esa visita...

Critica: 
Marisa Béjar

Precioso poema que habla de censura y demás limitaciones del hombre...Pero que ensalza al corazón ( el latido) como verdadero triunfador. Me gustó mucho. Saludos.

Critica: