Clepsamia

La totalidad de la humana sinceridad
se guarda en un bolsillo pequeño,
un pequeño rincón en un abrigo azul,
protegida, quizás,
guardada está,
tanto,
que se antoja como un artículo de fácil olvido,
un pequeño papel,
un ordinario pedazo de documento mal doblado.

El frío se mide en las obsesiones,
una cuenta regresiva resuena casi muda,
en esta vida dependiente de los números;
entre la gravedad y el humor,
subyugada a esa maldita secuencia,
que decae como la arena sideral en un reloj,
esa espina como dolor crónico,
ese pánico de saber que somos los hijos de los últimos dígitos;
nosotros,
los autoexiliados,
los que ya no recitamos el tiempo huidizo,
los que tan solo narramos la historia perdida
de una inmensa y sonriente creación,
en un pedazo de roca,
como polvo en el ojo divino de un ser que pronto despertará...
Tal vez mañana, tal vez, no sé...

Tal vez en este minuto como un recuerdo desvanecido.
Tal vez en esa noche que nadie vislumbró.