Tan solo nuestros cuerpos.

A veces es necesario hacer cosas de las que te empuja el corazón, cosas que la razón no permitiría.
Solo hay una oportunidad, con opciones múltiples, pero estas dispuesto a vivirlo, lo vives y encuentras el balance de todo lo que necesitabas en la vida.
Decidí que nuestros encuentros fueran clandestinos, sigilosos y momentaneos, decidí que te amaría solo de noche, que en la mañana seriamos perfectamente desconocidos.
Tomé todo de ti, como un acto religioso, te bebí y comí hasta el alma, asi como el sol se encuentra con la luna en un parpadeo, a veces solo de noche, en el silencio de las figuras, de los algoritmos, de las fantasias y de lo que aun no se ha descubierto, de lo incredulo y irreparable.
En la soledad de nuestras noches, en la presencia de nuestras necesidades y deseos, en la tenue noche y oscuro pensamiento. tu y yo.