Érase un poeta y una falsa poetisa(prosa-desamor)

Érase un poeta y una falsa poetisa,
una historia de negros versos sin amor,
donde el poeta a pesar de espera y pasión
se encontró con una actitud egoísta.

El poeta la amó,en ella tenía fe,
adoró cada parte del alma y cómo escribía
pero con el tiempo el pasado de esa mujer
hizo trizas todo lo que él creía.

Tras tres años de efímeras promesas,
de grandes errores y palabras vacías,
él la perdonó porque aún en ella creía.

Mientras ella aseguraba amar,
lo separó de su propia vida,
le mintió, le marginó, le prometió,
cambió sus planes y no le respetó
y entre grandes lloros y sollozos
le exigió un sacrificio total
después de pedirle su perdón.

Érase la historia de un poeta y falsa poetisa,
de versos vacíos y carentes de sentido,
de hechos que no fueron cumplidos,
de un irrespetuoso camino y egoísta.

Al tener ella su inmenso perdón,
otra vez de nuevo con él jugó,
como siempre pidiendo sin dar,
sin ser una amiga, sin caridad,
en otros brazos ella se refugió.

Así que el poeta que creía en el amor,
despúes de perdonarla setenta veces siete,
ante el verso vacío, ante el agua contaminada,
ante el veneno que nunca mereció,
el poeta de no ser correspondido se cansó.

Érase la historia de una falsa poetisa,
que de cristales débiles su alma,
todo lo quería y nunca daba nada,
sin importar las consecuencias de sus faltas,
sin importar perder a quien la amaba.

Un día le dijo:

Cómo escribes y compartes,
¿ es que acaso quieres ligar?
y no comprendió que un poeta
escribe y escribe sin más.

Se rió de otros escritores,
y con todos se comparó
entendió que no era poeta
pues a la poesía vejó.

Comprendió pues el poeta,
que hay personas con careta,
que en sus palabras esconden
un profundo abismo y desorden,
¡no os fiés de las palabras!
una cosa es en la boca dicho
y otra con el alma hecho.

Os dirán que os aman
pero os abofetearán,
os dirán que os quieren
pero sólo a ellas se amarán,
buscando aquel que se adapta
a sus planes y a sus pautas.

No dejéis de ser vosotros mismos
aunque os cueste el falso amor,
sed fuertes ante sus egoísmos
y nunca perdáis la pasión.

Autor: Daniel Plans Dimanuel
Cádiz,España
Un día triste, con niebla
y con ganas de compartir esta historia
que otro poeta me quiso transmitir.