Poema 3/2013

poema de Zadomen

En la soledad del cuarto, beso mi almohada,
casi nada queda entre mis manos,
apareces tú como en un sueño
con tu cabellera de cascada,
apareces tú como mojada por el llanto,
con tus ojos que confirman que has amado.

No me basta tu perfume para el equipaje
prefiero los labios húmedos y sedientos,
nada es especial si tú no estás,
de todas formas, estoy decidido a quererte,
los vientos no serán capaces
de apagar el fuego y la lujuria.

Eres demasiado hermosa para perderte,
soy demasiado feliz entre tus brazos;
voltease sobre mi pecho una andanada de dudas,
y sin embargo supero la mezquindad de los celos
y vuelvo una y otra vez sobre el espacio
que dejas, a mi lado en el lecho.

No te quedas dormida porque no te dejo,
perdiese la impresión de estar conmigo en silencio.
Luces verdes entre pestañas,
que cada vez brillan más y se burlan de los tiempos,
que pasamos esperando, en cualquier parte del mundo,
para saciar el deseo.

Zadomen