La duda cardia

La mente no entiende de negación y te van llenando de "nos" los oídos.

¡Maldita sea! Tantas palabras, figuras de concreto, estancan los buenos sentimientos y sentidos, cual fuese amnecia de nacimiento, sentido común se pierde en el trayecto.

La propiedad se edifico, como cultura quedo, me duele el corazón, hasta el río se corrio...

Creo que parte de mi no llego, se quedo en el camino, agua atrapada por hilos, delirios del destino.

Sí has sentido la duda cardia, su insistencia acechando y el caudal con voz fría, un arrebato te domina, te paraliza.

Ya eres victima del canto, pasa del aislo, encima del pavimento, recupera tu camino, derrumba esos ismos, llega al mar y siente como los signos aparecen.

La duda te devoró al dominarte, calmarte, la interrogación es más tibia que fría, siente los peligros del día a día, la duda cardia tiene hambre sempiterna, cada vez más profundo te lleva.

Mar una fuente de infoemación, la inmensidad dentro de tu craneo, has bajar todos los hilos, para que cada ciclo sea mejor.

No se trata de olvidar los caminos, cada momento ya sonó, sí ea necesario busca eaa vibración, ponte en el lugar del yo y el otro, tambien ve un ellos.

Has que suene distinto la emoción, el sentimiento, quítale la carga a esos recuerdos, hay que saber dominar el tiempo y no perder los fragmentos, para elevarse al cielo y bajar alegre del cerro.

Cada vociferación algo del mundo cambió, se consciente con la vegetación que sale de vos, un ecosistema depende de tí, cuida lo que dirá tu voz.

No erea sólo tú y yo en el dialogo, hay muchos, estamos en una crisis de estancación, el agua olvido fluir y sentir el río, creen que son sólo tierra, tantos mueren por eso cada día.

Hay que sufrir y asumir que crepitaras, intenta que sea una melodia feliz, la Pacha lo va a sentir.