Adiós

En esta triste despedida, me despido de tu maltrato,
de las lágrimas derramadas, de mi corazón destrozado.
Me cansé de ser tu juguete, de tus mentiras y engaños,
de soportar tu indiferencia, de tus actos tan dañinos.

Te aprovechaste de mi amor, de mi entrega sin medida,
pero esta vez me niego a seguir en esta herida.
Prefiero morir mil veces, antes que volver contigo,
a recibir solo migajas de un amor sin abrigo.

No. Ya no más. Esta vez me libero de tu opresión,
de tus palabras hirientes, de tu falta de compasión.
Me despido sin rencores, con la certeza en mi ser,
que merezco un amor puro, que me haga florecer.

Así que adiós, cruel amor, adiós a tu falsedad,
a tu egoísmo desmedido, a tu falta de bondad.
Prefiero marchar en soledad, que con tu sombra a cuestas,
porque sé que en mi camino, encontraré nuevas festas.