Rencor

He tirado a la basura poemas que escribí.

Hoy me ha costado ver en alguien una mirada feliz.

Conservados sentimientos en miel,
Uñas que desgarran en la piel,
rotas de rascar muros,
de hacer aviones de papel
que no consiguen volar con nada,
ni para nadie.

Hoy no he querido dejar regadas las flores de mi jardín.

He querido dejar ahogarse a lo poco que hay bello en mi.

Un ángel intenta hacerme sonreir,
y yo solo le veo llorar sin ver el fin.
De rodillas suplicándome
que la pistola no se dispare.
Un ángel intenta hacerme sonreir,
y Dios se ha vuelto a equivocar.
Hay una enfermedad en mi
que impide a mis sueños poderlos tocar.

Caigo en una droga que la soledad suele inyectar.

Esta noche han disparado por la espalda a mi sensibilidad.

En esta ciudad de gente estúpida,
que nunca mira hacia su alrededor,
que solo piensan en sí mismos,
consumidos por una falsa protección.

Un ángel intenta hacerme sonreír
y yo le quiero matar.
Estoy harto de bufones
que camuflan la verdad.
Un ángel ya no volverá a reír
y las consecuencias ante Dios
me dan igual.

¿Hasta donde crece una herida?
¿Cuánto tiempo dura el shock?
Habéis creado un mundo sin caricias,
de miedos y falta de superación.

¿Ya habéis enterrado vuestra vida,
camuflada cada sensación?
Personas, todas de mentira
ya ni se escucha un solo corazón.

Dios, no intentes hacerme sonreír.
Ya has creado un infierno dentro de mi.